Nada menos que 30 sacerdotes, miembros de la veterana Congregación de San Vitores, participaron en el capitulo anual que se celebra en la primera semana de septiembre en las instalaciones del Exconvento de San Vitores en Fresno.
Además de celebrar el capítulo, también tuvieron su misa y comieron todos juntos.
Así habla de la Congregación el párroco de Cerezo Don Restituto Barriuso en su web.
CONGREGACIÓN DE SAN VITORES
Corría el año mil setecientos diez y seis y un grupo de sacerdotes de la zona del Tirón, movidos por la devoción tan extendida dentro y fuera de la Provincia de Burgos y por el ejemplo, virtudes y heroicidad evangélicas que tanto brillaron en el Santo Cerezano, Vitores, decapitado en Quintanilla de las Dueñas anejo de Cerezo de Río Tirón, determinaron fundar una Congregación de eclesiásticos para cuyo régimen y gobierno ordenaron y articularon las CONSTITUCIONES Y REGLAS que regirán en adelante, previa aprobación de la Jerarquía eclesiástica .
A partir de esa fecha, comenzó prácticamente a regir la Cofradía de San Vitores para Eclesiásticos aunque, como es lógico, hubo que esperar algún tiempo hasta su aprobación .
La fecha señalada ,coincidiendo con la traslación de las reliquias del Santo a la nueva iglesia , 1715, sería dentro de la infraoctava de la Natividad de Nuestra Señora de cada año y así se viene respetando más o menos salvo fuerza mayor o por razones alegadas por los miembros de la Junta .
Pensaron, dadas las circunstancias favorables de la presencia de los Padres Franciscanos en el Convento de San Vitores, sería éste el lugar idóneo para las reuniones ya que disponían de todo lo necesario para sus fines, Salas de reuniones para el Capítulo de la Congregación, Capilla para la celebración de la Santa Misa y Refectorio para una comida de Hermandad.
Ha pasado mucho tiempo; y año tras año, entre los diez primeros días del mes de septiembre un grupo de Sacerdotes, diseminados por la Diócesis, por Diócesis más o menos limítrofes y algunas muy lejanas concelebran y viven el espíritu de amor, de caridad y fraternidad que se respira en la Congregación desde su fundación.
Como dato anecdótico pero esclarecedor de este espíritu de hermandad, de amor sacerdotal y solidaridad con el necesitado recordamos cómo en el “destierro” del Cardenal Segura, la Congregación de San Vitores a la cuál pertenecía, puso a su disposición los pequeños ahorros que poseía para paliar en lo posible las dificultades que en aquel momento se suponía estaba pasando; y pasado no mucho tiempo recibía la contestación de agradecimiento del mismo cardenal Segura agradeciendo el gesto .
El día diez de septiembre de este año dos mil tres, un año más fieles a la tradición un grupo de unos cuarenta sacerdotes tenemos la cita en el Convento de San Vitores, y fieles a las Instituciones seculares cumpliremos con lo establecido, recordaremos nuestros deberes sacerdotales con los sacerdotes vivos y difuntos que es una de las reglas de oro de la Congregación. Habrá abrazos sinceros de amigos y comida de Hermandad. Os esperamos. Viva San Vitores.
Restituto Barriuso.